índice no. 35
José Roca
Reflexiones críticas desde Colombia

Comentario a Columna 35 1 de abril de 2002
Retransmito el texto de Franklin Aguirre, director de la Bienal de Venecia de Bogotá, en respuesta (algo tardía) al mail de Bárbara Santos.

José Roca

Franklin Aguirre

En los casi ocho años de gestión frente a la Bienal de Venecia de Bogotá, convertida ya en un evento con un reconocimiento internacional, son decenas de comentarios los que hemos recibido sus organizadores y uno que otro integrante del grupo de manera personalizada.

No pueden imaginarse ustedes el gran repertorio de opiniones de todo tipo que han llegado a nuestros oídos, algunas de suma importancia que han ayudado a construir el evento corrigiendo poco a poco sus errores, o acentuando sus logros. Otras veces comentarios que nos sugieren seguir adelante o también detenernos y otras posiciones viscerales y personalizadas que no merecen más que hacerlas pasar desapercibidas y dejar que sean disueltas con hechos concretos y no con palabras acaloradas.

Es pues, una de estas opiniones y la sugerencia de algunos de los participantes, colaboradores y otros elementos actuantes en la Bienal de Venecia de Bogotá, quienes han sugerido mi participación para hacer un rápido diagnóstico de la situación, con el fin de resolver algunas dudas y hablar sobre su proyección.

Una breve reseña

La Bienal de Venecia nació como una estrategia para desplazar el arte contemporáneo de los espacios habituales hacia un barrio homólogo de la ciudad Italiana, al sur de la ciudad de Bogotá.

El "arte" es entendido por los habitantes de un "barrio" (hablando en forma genérica) como entretenimiento, no es fácil, aun con el paso de los años, llamar la atención de un grupo de personas que no tienen como hábito visitar Galerías ni museos, incluir dentro de sus agendas cada dos años una exposición de arte contemporáneo, al lado de una final de microfútbol.

De hecho algunos de los habitantes del barrio e incluso algunos artistas, (tal vez sarcásticamente) me preguntan por el "Festival de Venecia" esto no me parece nada anormal pues algunas de las autoridades locales o entidades sin animo de lucro que apoyan la cultura local "venden" cualquier proyecto con este perfil, para ellos no hay diferencia entre una exposición de arte, una comparsa, un baile de personas de la tercera edad o una feria del libro. La cultura entendida como un término abierto encierra de por si todas estas manifestaciones, pero a la vez sugiere diferencias dentro de sus mismas subdivisiones institucionales; arte, artesanía, folclor. etc.

Sin ánimo de parafrasear a ningún filósofo vigente aún, en el arte contemporáneo todo es válido, aun a costa de la pérdida de uno de sus principales objetivos; el público. Por esto y otras razones pensamos, en principio, plantear como tema principal el barrio mismo, al grupo de artistas que expondrían su trabajo por primera vez en la Bienal de Venecia, imprimiendo en las obras un caracter In Situ (realizadas directamente en el contexto donde posteriormente serían exhibidas).

Esta estrategia pretendía cerrar un poco la brecha entre la lectura de las obras por parte de un grupo de habitantes que en su mayoría nunca habían accedido a una exposición de arte contemporáneo o que lo habían hecho, si haber logrado tener el menor interés en una muestra que poco o nada se relacionaba con ellos. También se buscaba que el espectador desprevenido, sin necesidad de una preparación previa, se re-conociera de una manera formal, o al menos emocional, en alguno de los referentes citados por los artistas en las obras.

Las lecturas de uno y otro lado

Así, comenzaron a surgir muchas reacciones, lo que nos sugirió que se daba de una u otra manera ese acercamiento, - Ah, entonces un espejo roto pegado al piso, también puede ser arte? -, !Mire Mamá, ésa es su foto, y detrás está la de nuestra casa-, ¿Y porqué no la hacen todos los años?, ¡Esto no es Arte!, ¿Por qué no hay bodegones es la exposición?, ¿Esto es para vender?, ¡Qué gracia, yo también puedo pintar eso y no he estudiado artes ! ¿Tengo unos cuadros que pinte hace unos años , los puedo traer para mostrarlos?, etc. Las respuestas del barrio tan variadas como sus habitantes... son finalmente muchas de las razones para continuar con nuestro proyecto.

Cuando nos acercamos al barrio por primera vez, nunca nos imaginamos que el proyecto fuera a realizarse de manera ininterrumpida durante 4 ediciones. De hecho no iba a realizarse una cuarta edición de la Bienal en vista de los inconvenientes que teníamos con el presupuesto suficiente. Fueron algunas personas (habitantes de Venecia) que me encontré por casualidad en Chapinero un día que caminaba por la séptima, quienes me preguntaron por la fecha de inauguración del evento. Al no tener una fecha precisa les dije que estuvieran pendientes pues se realizaría en noviembre o diciembre de 2001.

La Bienal, por fortuna, cuenta con un amplio apoyo en los medios, a tal punto que personas de otras ciudades e incluso otros países gracias a la Internet siguen paso a paso las noticias del evento. De hecho, La Bienal de Venecia siempre ha contado con un cubrimiento lo suficientemente visible (a diferencia de otras gestiones similares tanto públicas como privadas) para conservar su lugar dentro de los habituales espacios de la plástica nacional. Pese a esto es muy molesto que muchas personas no conozcan aun la Bienal, pues dicen de una manera muy ligera que la han visto tanto en los medios que "sienten" que han estado allí. Es una tontería además que muchos de los espectadores no vayan a la Bienal por temor al barrio o porque simplemente no saben llegar a él. Para resolver este inconveniente, la invitación de la IV Bienal de Venecia contenía un mapa del barrio con las rutas de acceso y el punto donde se encontraban las sedes.

Dificultades de la IV edición de la Bienal de Venecia

Uno de los grandes inconvenientes para la realización de la IV Bienal de Venecia, fue la negativa por parte de la autoridades del Salón Comunal de Venecia (Sede tradicional) para realizar el evento en el Salón Comunal del barrio si no se pagaba una exorbitante cifra por su alquiler, cifra que curiosamente aumentaba después de cada reunión donde se buscaba llegar a un acuerdo. Para solucionar este problema, alquilamos una casa ( por un precio notablemente menor) en el barrio a dos cuadras del Salón comunal donde almacenamos algunos materiales e hicimos algunas de las reuniones previas, gracias al oportuno aporte de un bono por parte de los participantes, los organizadores y otras personas que quisieron de manera voluntaria apoyarnos. Inicialmente todo parecía estar bien pero, era tan estrecho el espacio que en un momento llegaron a estar las obras tan cerca unas de otras y los recorridos se hicieron tan difíciles que decidimos buscar un lugar alternativo pues era totalmente inconveniente mostrarlas de esa manera.

Finalmente tuvimos la fortuna de encontrar un local cómodo espacioso y muy bien acondicionado donde instalamos la IV Bienal de Venecia y donde se realizaron algunas de las conferencias y los talleres con los niños del sector. Toda esta odisea de traslados, obtención de recursos y cambio de fechas produjo un trastorno en los participantes, apenas lógico pero tales inconvenientes, por fortuna, muy inteligentemente resueltos por la mayoría de ellos.

La Difusión

En las anteriores versiones de la Bienal contamos con toda la difusión de la Junta de acción Comunal, dirigida entonces por el Señor Jorge Villamarín quien procuraba por varios medios y en los términos locales más efectivos, convocar a los espectadores. En este caso, esta vital estrategia no fue posible, pese a esto la Bienal imprimió 2.000 volantes de mano con la programación de la IV Bienal y de la misma manera realizó 2.500 invitaciones que se repartieron en su mayoría en el barrio a través de las sedes de Fotojapón, el café Internet Doble Click y Marquetería una Hora, además de la promoción directa, algunos artículos del diario el tiempo. Gracias también al señor párroco de Venecia quien nos anunció en sus misas, leyendo la programación y una invitación masiva via Internet al público en general de Bogotá a través de e-groups y portales comerciales de Internet.

En cuanto a la difusión Internacional, el evento se estuvo en importantes espacios de discusión virtuales y/o reales, como el encuentro de artistas del convenio Andrés Bello (Caracas, Venezuela 2001) dentro del marco del Salón Pirelli de Arte Joven y la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Madrid ARCO 2002 ( Madrid, España 2002)

Estética, Lógica y Ética

La Bienal de Venecia siempre ha contado con la participación de artistas de Venecia y de la Localidad de Tunjuelito. En la Tercera edición de la Bienal se hizo evidente la necesidad de incrementar la calidad en los trabajos locales pues todos podían participar por ser habitantes de la localidad sin ninguna objeción haciendo cada vez más irregular la lectura entre las obras y más disímil su calidad plástica teniendo en cuenta los diferentes orígenes académicos de los participantes.

Por esto, se planteó una línea temática para la IV Bienal de Venecia <Arte y Gastronomía> bajo el lema -Porque no todo entra por los ojos-. Alrededor de un tema central, todos y cada uno de los participantes sin importar su procedencia tenían que cumplir con esta temática en particular además de las características formales básicas de una obra, entre ellas una buena factura y además acercarse al barrio, pues de allí debía surgir su propuesta. Todo esto se dio en principio, pero hubo un pequeño elemento de nuestra idiosincrasia que matizaría tales participaciones. La ética de cada artista.

Desde la primera edición de la Bienal de Venecia y me atrevería decir que en muchos otros espacios oficiales e informales similares algunas de las obras se acomodan de manera forzada a las convocatorias, disfrazando unas cosas con otras, adaptando el texto de la justificación, cambiándole de color al fondo de la pintura o simplemente modificando el título de una manera muy sagaz. Lo digo porque he tenido la oportunidad de ser jurado de muchos eventos en algunos de los cuales el artista tiene la desfachatez de presentar la misma obra en tres o cuatro salones simultáneamente a ver si pasa en alguno de ellos por obra y gracia del Espíritu Santo.

No puedo responder de manera personal por las actitudes de los artistas que como curador elijo para un evento y creo que ningún curador de otro evento pueda hacerlo pues siempre hay ese margen peligroso de riesgo que se corre al elegir lo debido o lo indebido, y más aun cuando se eligen proyectos, no obras terminadas. En ese caso el riesgo se multiplica.

Sobre la selección y la curaduría

La Primera Edición de la Bienal (1995) se hizo por invitación directa, pues no teníamos la información suficiente para abarcar un amplio panorama de visiones particulares como era nuestra intención. En la Segunda Edición (1997) Se recurrió nuevamente a la invitación directa, valiéndonos de listas de artistas que fueron facilitadas por artistas, galeristas, curadores y entidades oficiales. En la Tercera Edición (1999) se realizó una convocatoria abierta a través de artículos en El Tiempo, algunas otras publicaciones, carteles que fueron fijados en las Universidades y Academias, además se repartieron volantes directos en las inauguraciones de las exposiciones (a las que habitualmente solo vamos los artistas) otros sitios como bares, tiendas y también por Internet. En la Cuarta Edición (2001) se hizo de igual manera por convocatoria abierta utilizando los medios anteriormente citados. En este caso en Particular, a diferencia de las anteriores ediciones, la selección y premiación, estuvo a cargo de 3 personas notables en el medio de la plástica y que han estado cerca del evento desde su primera edición: María Eugenia Niño, Eduardo Serrano, Gustavo Zalamea acompañados por mi como director de la Bienal.

Los Artistas locales y la V Bienal Internacional de Venecia.

La Bienal de Venecia va hacia su V versión en el año 2003. Para esta importante edición donde cumplirá 10 años el evento. El país invitado será España, de donde vendrán artistas y grupos de artistas que vivirán en Bogotá durante un mes realizando sus obras. En este caso el tema será AMÉRICA 3 X 1, <Pague una y lleve tres> parodiando la utopía de la unión de una sola América y las promociones del barrio donde se paga un artículo y se llevan tres.

Para lograr una alta calidad en el evento la organización de la Bienal Internacional de Venecia de Bogotá, realizará este año el Primer Salón Local de Venecia, donde artistas del barrio Venecia y la localidad de Tunjuelito realizarán sus propuestas a partir de sus técnicas particulares pero alrededor de la temática de la V Bienal de Venecia, esto con el fin de lograr un contexto más claro que focalice la atención en la producción y la difusión de las obras locales de la manera más conveniente y tal vez despierte un mayor interés en los habitantes al apoyar a los suyos en su territorio.

Este evento será la antesala a la participación de la localidad en la V Bienal de Venecia, pues del Primer Salón Local de Venecia, surgirán los 13 participantes locales ante la Bienal, cuyas obras viajarán a la ciudad de Madrid, España en el mes de febrero de 2003 para realizar una exposición en la Sede del INJUVE (Instituto de la Juventud) entidad del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales de España.

Con el fin de lograr el intercambio de experiencias de los artistas que han participado en anteriores ediciones de la Bienal, se convocará a los mas de 100 artistas que han participado en la Bienal de Venecia de Bogotá, gestores de otros eventos e investigadores, para que se reúnan con los artistas locales y les den sugerencias que puedan enriquecer procesos y agilizar estrategias de producción.

Convocatorias

La invitación a participar en el I Salón Local de Venecia y la V Bienal Internacional de Venecia será publicada en Agosto de 2002.

Contactos y apoyos

Aprovechando este espacio y admirando la paciencia de quien haya llegado a este punto en este mensaje, queremos invitar a todas aquellas personas que quieran unirse a la producción de este evento de una o otra manera para que se comuniquen con el fin de lograr un primer contacto.

De igual manera si quieren hacer algún comentario sobre la Bienal de Venecia, hagan llegar sus palabras a las siguientes direcciones:

Correos Públicos

bienalveneciabogota@hotmail.com
bienalveneciabogota@lycos.com
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©  Texto: F. Aguirre, Columna de Arena: José Roca

Presentación en internet: Universes in Universe, Gerhard Haupt & Pat Binder
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